INGRATOS Y MAL AGRADECIDOS

El actual gobierno federal, concretamente el titular del Poder Ejecutivo, en todo lo que lleva de su sexenio no ha dejado de sorprendernos con sus desplantes, ocurrencias, incongruencias, distractores, predicas de división, promoción del odio y un tufillo, cada vez mayor, de aspirante a dictador, que hoy ya es una clara hediondez, percibida por todos; claro que algunos la perciben como perfume de gardenia por pura conveniencia.

Está por demás decir, pero lo reiteramos, que para AMLO gobernar es hablar y hablar, es imponer su visión de país, de tener otros datos cuando la realidad lo refuta, de pedir a sus colaboradores lealtad absoluta, de construir a diario una vorágine en la cual se siente cómodo, es su elemento. Se auto percibe con la calidad moral para reprender a todo el mundo, es la rectitud moral encarnada, el perfil perfecto de hombre bueno y sabio por lo que no se cansa de usar la tribuna de las "mañaneras" para adoctrinar al pueblo, a su pueblo, todos los demás son fifís, neoliberales, conservadores, la mafia del poder, y nos lanza un ¡guacala! para hacernos sentir el dolor por su desprecio.

A más de tres años de su administración no se ve con claridad que se tenga un proyecto de gobierno, un plan serio al cual atenerse, a los nulos resultados en seguridad, salud, economía, educación y etc. etc. Los responsables son Salinas, Fox, Calderón, su villano favorito y Peña. El percibe a su gobierno como una victima de tal periodo, por lo que lo exime de su responsabilidad de dar resultados al pueblo que tanto dice defender. La bandera de la lucha contra la corrupción la sigue enarbolando, desplegada a los cuatro vientos, aunque los corruptos del pasado, y sí que los hay, sigan gozando de cabal salud, no así sus enemigos políticos, ¿o tú que dices, Anaya?

Carlos Loret, ese periodista "golpeador", ya se pasó de la raya, eso no se puede tolerar, pues estamos en el México de la 4T; las predicas mañaneras no han penetrado en su corazón y sigue siendo independiente, con criterio propio; urge encontrarle, o fabricarle un delito, ¡pero ya! Todos unidos para acabar con los asapiracionistas mayores. Con Brozo la misma receta. Atreverse a denunciar el modus vivendi de la familia, no puede ser, ¿Por qué? Quién les paga busca hacerlo quedar mal, a él que "ya no se pertenece", que madruga todos los días para adoctrinar al pueblo y que por el vive y respira. ¡Que maldad!, pobre Pío, pobre Martin, pobre de la prima Felipa, pobrecito de mi hijo, todos honestos haciendo su luchita para poder vivir.

_¿Cómo salir de esta crisis en la que el irresponsable de Loret nos ha metido?, ¿ tú que dices Epigmenio?, Jesús, una idea; Marcelo, sácame de ésta; Claud... no, déjenla, es mejor que no opine. Señor, alguien aconseja que lance un decreto en el que declare que usted y toda la familia real, perdón, perdón, la familia López Obrador, ampliada y extendida, son ajenos a cualquier tipo de corrupción, son puros e inmaculados, el prototipo de decencia _ y ¿qué es prototipo? pregunta el Inmaculado mayor; como están las cosas tengo que desconfiar. _Buenos Señor prototipo es como un ejemplar... _¡ya! ¡ya! El decreto va.

_Y ¿qué opinan si le añadimos al decreto que todo aquel que dude y desconfíe de lo aquí decretado sea declarado de ingrato y mal agradecido? Y se escuchó un coro contestar: - Es usted un genio Señor, _y hasta se puede declarar antimexicano, añadió "ya sabes quien", con una cara de profunda humildad.

15 de febrero de 2022