UN DEBATE… ¡SIN DEBATE!

Por fin se llevó a cabo el tercer debate de los candidatos a la presidencia de la República. Los tiradores fueron la candidata de la Coalición "Fuerza y Corazón por México": Xóchitl Gálvez; la abanderada de la coalición "Sigamos Haciendo Historia": Claudia Sheinbaum, y por Movimiento Ciudadano: Jorge Álvarez Maynez.

Por lo que se vio en este tercer debate -por cierto, muy acartonado-, donde los candidatos no se miraban a los ojos, y los conductores Luisa Cantú, Carmen Elena Arcila y Javier Solórzano, aprobados por el Instituto Nacional Electoral (INE), parecían conductores muy formales que no se prestaban al debate.

Este programa de televisión careció de frescura, con un Maynez muy autosuficiente, dando cuerda al aborto; una Claudia Sheinbaum ubicada en un planeta alterno donde MORENA hacía las cosas bien; ni de chiste se salió del guión escrito por la 4T.

La única que le puso salero al debate fue Xóchitl Gálvez, que puso el dedo en la llaga varias veces, tratando de provocar un debate, pero… Sheinbaum ni se enteró y Maynez traía su agenda para completar los temas de MORENA.

Si a este acto de promover sus posiciones y planes para un proyecto de Nación, le llaman "debate", dejémoslo ahí, ya que no hubo debate… La única enterada en un debate fue Xóchitl, que planteó sus posturas y la suma de sus intervenciones nos dieron una clara radiografía de la situación en el país. Ni Maynez ni Sheinbaum se dieron por aludidos y se ajustaron a un script mediocre y mentiroso.

Xóchitl, con un conocimiento más profundo y realista, propuso retroceder para rescatar programas que beneficiaban a millones de mexicanos, como el Seguro Popular, las estancias infantiles, las escuelas de tiempo completo y la creación de más universidades.

Por su parte, Sheinbaum hizo un análisis triunfalista de la gestión de MORENA, sin reconocer la crisis de seguridad, el manejo del Covid-19, la eliminación presupuestal del CONACYT, etc. No hubo ninguna propuesta original de Sheinbaum. Todo lo que decía se ajustaba a la Agenda de AMLO y MORENA. Tenía más vida el robot "Sofía" que la cara de Claudia, que andaba flotando en su mundo de fantasía alterna. Ninguna provocación afectó el gesto, sin gesto, de Claudia… simplemente no le entró al debate.

Maynez propuso algunas iniciativas de ésas que prometen cada sexenio, pero la diferencia es que eran adornadas con una sonrisa Colgate. Tampoco le entró al debate. Sólo dijeron mentiras, y entre Claudia y él, coparon a Xóchitl.

Si Xóchitl hace a un lado a sus patrocinadores globalistas y pone algún remedio de acuerdo a su realista análisis… ¡Habemus Presidente!

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